UN RINCÓN PARA JUGAR
Ya decía Bruno Munari que un niño creativo, era un niño feliz. Los niños son el futuro de nuestra sociedad y hay que ayudar a su desarrollo y crecimiento.
Para un niño su habitación es donde trascurre una parte fundamental de su vida y por esto, debería tener todas esas zonas que complementan sus actividades. Un rincón para jugar es clave en el espacio destinado a los niños.
Por ello, en el post de hoy vamos a hablar de ese rincón especial que debería haber en toda habitación de un niño. Todos ellos necesitan un rincón dónde todo pueda ser posible, donde se les permita ser espontáneos y dejar volar su imaginación, porque los niños aprenden jugando. En todo este proceso, se aconseja a los mayores dejarles vía libre, e interferir lo menos posible. Pero si en algo podemos ser de ayuda, es en proporcionarles su propio espacio, una zona que les defina a sí mismos y en el cual puedan disfrutar y pasarlo en grande.
Para ello uno de los primeros pasos a seguir es descubrir aquello que más les gusta y potenciarlo a través de una buena decoración. Como por ejemplo, de qué color pintar sus paredes o techos y si es conveniente poner algún motivo o dibujo.
Uno de nuestros consejos para definir un rincón para jugar los más peques es crear contraste entre las diversas zonas para diferenciarlas del resto de la habitación, como por ejemplo colocando una casita personalizada, un escondite o una tienda de campaña, del material que se prefiera para que se divierta y viva nuevas experiencias. Las hay de muchos tipos y materiales, la podemos crear con ellos, todos juntos, haciendo a los más peques partícipes, utilizando telas y decorándolo con varios cojines, una pequeña alfombra y sus juguetes preferidos.
Otra opción como un rincón de juegos sería colocar una casita de cartón o de madera. La de cartón a la vez que sencillas, se pueden pintar, y es una buena idea porque se transporta fácilmente y así el niño puede cambiar su rincón al sitio que más le convenga. Las casitas de madera son una buena elección si tenemos en casa a más de un niño, teniendo en cuenta que son más resistentes.
También es una buena decisión diseñar el rincón de nuestros hijos según sus pasatiempos favoritos. Para los que disfrutan haciendo manualidades o quieran explorar su vertiente más artística, podemos crear una zona creativa, tipo estudio. Sean bienvenidos objetos como una pizarra, cajones para guardar sus utensilios y una mesa con sillas que será el centro de toda operación.
Para aquellos que prefieran relajarse y pasar el tiempo leyendo, se puede idear un rincón para jugar que sea cómodo y al cuál no le falte una original estantería, con los cuentos preferidos por nuestro menudo usuario. Siempre hay que tener en cuenta la disposición de la luz en la habitación, para elegir el mejor rincón y crear un ambiente propicio.
Aquí os traemos otros buenos ejemplos de rincones hechos a la medida de los más peques Uno para los más artistas, con un vestidor o un gran foco que sirva para poder maquillarse, disfrazarse y hacer la sesión de fotos más divertida. Otro dónde el deporte es el rey y nuestros peques disfruten jugando mientras practiquen su actividad preferida.
Por último, para llegar a crear un rincón para jugar a medida, os recomendamos elegir muebles que sean flexibles y de fácil movilidad, para cambiarlos de sitio cada vez que se quiera, además de crear un espacio bonito, original y acogedor donde desarrollen su imaginación y creatividad con varias actividades a la vez.
El secreto está en diseñar y decorar el espacio de manera que el niño se sienta identificado y seguro de sí mismo, ayudándole a convertirse en quién quiera llegar a ser.